Estética y antienvejemiento

Con el paso de los años, nuestro cuerpo experimenta de forma natural diversos procesos que nos conducen inexorablemente al envejecimiento de la piel, caracterizado por la aparición de arrugas, una piel menos tonificada y radiante, una piel más fina y una piel poco hidratada. Para contrarrestar los signos del envejecimiento y mantener una piel joven y elástica, y garantizar una vida no sólo larga y duradera, sino también de calidad, se pueden utilizar diversos métodos. El estudio y la comprensión de los cambios microscópicos y macroscópicos que experimenta la piel durante el envejecimiento nos ha proporcionado las herramientas para combatir el envejecimiento cronológico y ralentizarlo, manteniendo la resistencia y la elasticidad de la piel, el grado adecuado de hidratación y la firmeza.